Todos tenemos un rincón nuestro en el mundo. Un lugar para pensar al que hemos vuelto cuando lo hemos necesitado, o quizás un espacio tranquilo para leer un libro, echarse un cigarrito, una cerveza, o simplemente estar..
Mi rincón se encuentra en el Puerto de Santa María, en Cádiz. En el camino serpenteante que baja desde el Pinar del Manantial a la playa del Ancla.
Me encanta sentarme en el murito, que acota el camino, sacando los pies y encarando al mar. Llevo muchos años utilizando este rincón especialmente cuando necesitaba reflexionar, o relajarme, aunque también en citas para disfrutar del mejor atardecer que se puede observar en la zona. Desde este punto, no solo es la escénica panorámica, de toda la playa, con Cadiz al horizonte, el sol y su reflejo en el mar; Sino el sonido de las olas y brisa, que suavemente mece las hojas de la flora que viste la duna.
El camino era antaño parte de una propiedad privada, a una mansión que conquistaba la cima, y que fue demolido para la construcción de un hotel. Sin embargo, con la ley de protección de costas, se paró dicho proyecto. Día a día, la duna y flora se tragan más estas ruinas, volviéndose cada vez más bello el paisaje.