Mirador dos fedorentos

Mi rincón es un lugar alejado de la metrópolis. Ajeno a la ciudad, me gusta acercarme por la tarde, cuando cae el sol, y sentarme a pensar en la inmensidad del mar. 

Es un lugar lleno de magia e historias; pues sobre ella se cuenta una leyenda. En la época de las grandes conquistas, al ser las Ons una muralla natural, se libraban muchas batallas por la zona, depositándose todos los cadáveres en los fondos marinos. Debido a las corrientes de agua presentes allí, todos estos cuerpos tendían a depositarse en la playa que desde este mirador se observa, entrando seguidamente en descomposición. Debido al olor que se desprendía, las moscas acudían y se acumulaban en esa isla, es así que se le dio el nombre de "Illa das Moscas". Al encontrarse el mirador en frente de esta playa, solía llegar un olor muy desagradable, de ahí el nombre de fedorentos (malolientes en gallego).
 En la actualidad de esa historia solo conservamos las maravillosas vistas a todo el litoral sur de Las Rías Baixas, pudiendo observar en días soleados parte de las islas Ons y las Ciés, todas ella sumergidas en el inmerso océano Altláncico y dejando a la izquierda la costa gallega. La caminata que para llegar hasta ahí hay que realizar es, sin lugar a dudas, muy agradable y bonita, al tratarse las islas de un Parque Natural con especies animales y vegetales únicas en el mundo.